¿Qué busca realmente una sirena cuando decide habitar en lo más profundo del océano y dormir? ¿La paz, el silencio del mundo, el olvido? ¿O simplemente el reencuentro, el sueño, lo onírico?
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Si alguien desea utilizar cualquier ilustración, texto, video, etc., de "Ariam Ram" puede hacerlo sin problema, sólo pido que se indique su procedencia y se enlace a mi blog y que por favor, se me avise de ello. Como podéis comprobar nada está clausurado o protegido.
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En estas páginas no hay ánimo de lucro alguno, están generadas por amor al arte, para el disfrute de quién pasee por ellas y decida quedarse.
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Gracias y bienvenidos.
Ariam Ram
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Ariam Ram
6 comentarios:
Hay que vivir y dejar que nos vivan....aunque sean los suspiros quienes lo hagan. Me gustan tus aguas: tus profundidades y tus mareas. ¿Dormir?...luego.
Besos de nochebuena.
"Vivir y dejar que nos vivan", preciosa frase Yole...
Una sirena duerme y se queda en el fondo un tiempo, pues está un poco "arponeada", pero la mujer renace y eso es lo que importa.
Un beso enorme.
Sí, lo que importa es ese continuo renacer del ser y de tus latidos.
Besos de corazón.
Pues a tratar de renacer Eloy, no hay otra... Hace poco le he dicho a un amigo algo... "Una vez encuentras la llave la puedes tirar al río para siempre"... Me refería a esa que abre la puerta de los latidos... BumBumBum... Esa puerta inexactamente colocada entre el corazón y las entrañas...
Una pena que no todos sepamos lo fácil que puede resultar y andemos siempre a hurtadillas y con miedo.
Besazo.
He revisado de un tirón todas tus ilustraciones. Son estupendas. Sirenas y vampiros, sueños y sombras, dolor y color, todo mezclado como en un collage donde cabe el mundo interior. Son fantásticas. Me repito pero es que me han gustado mucho.
No te desagas de los hijos muertos, al menos entiérralos cerca de tu jardín, así podrás ir a visitarlos cuando, alguna vez, te falle la inspiración.
Besos,
Anabel, la Cuentista
De nuevo gracias Anabel... Si, en el clavo diste: sueños y pesadillas que se entremezclan y conviven.
Tan feliz como infeliz pueden hacerte los unos y los otros... Al final todo es lo mismo: un inmenso collage de trocitos de vida interior... Y exterior también aunque no nos demos cuenta.
Es un placer que te pasées por mi casa Anabel.
Besos,
Mar.
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